Helena Yagüez Health Coach

View Original

Actividad Física y Salud


¡Bienvenid@ de nuevo a mi blog de salud y felicidad! 😊

Hoy te voy a hablar sobre un tema que personalmente me súperencanta: ¡La actividad física y su papel en nuestra salud!

Así es, vamos a adentrarnos en el maravilloso mundo de mover nuestros bodies y descubrir cómo puede marcar una gran diferencia en nuestra calidad de vida. Así que prepárate para una dosis de energía y motivación, ¡porque vamos a hacer que suden esas endorfinas! 💦

Sabemos que el término "actividad física" puede sonar un poco rollo y formal, pero ¡no te preocupes! Estamos aquí para hacer que todo sea divertido y fácil. Pero…, ¿qué es exactamente la actividad física y por qué es tan importante para nuestra salud? Bueno, en pocas palabras, la actividad física es cualquier movimiento que hagamos con nuestro cuerpo, ya sea correr, saltar, bailar o incluso hacer el pino ¡si es lo que te apetece!

Ahora, déjame contarte un secreto: nuestro cuerpo está diseñado para moverse. Somos criaturas activas por naturaleza, ¡así que aprovechemos eso al máximo! La actividad física regular tiene un sinfín de beneficios para nuestra salud y te voy enumerar algunos de ellos para que veas lo increíble que puede ser:

  • ¡Adiós, estrés! La actividad física es como una terapia gratuita para liberar el estrés acumulado. Cuando nos movemos, nuestro cuerpo libera endorfinas, también conocidas como las hormonas de la felicidad. Estas pequeñas maravillas nos hacen sentir bien y nos ayudan a relajarnos después de un día agotador.

  • ¡Hola, energía! ¿Alguna vez has tenido uno de esos días en los que te sientes cansado y sin fuerzas? Bueno, la actividad física es la clave para darle un impulso a tu energía. Cuando nos movemos, mejoramos la circulación de oxígeno y nutrientes en nuestro cuerpo, lo que nos hace sentir revitalizados y llenos de energía.

  • ¡Bienvenida, salud cardiovascular! Nuestro corazón es uno de los órganos más importantes de nuestro cuerpo, y la actividad física es su mejor amiga. Al hacer ejercicio regularmente, fortalecemos nuestro corazón y mejoramos nuestra salud cardiovascular. Esto significa que reducimos el riesgo de desarrollar enfermedades del corazón y nos aseguramos de que nuestro motor interno esté en perfecto estado de funcionamiento.

  • ¡Vamos, huesos fuertes! ¿Sabías que la actividad física también es excelente para tus huesos? Sí, es cierto. Cuando nos movemos, ejercitamos nuestros músculos y también fortalecemos nuestros huesos. Esto es especialmente importante a medida que envejecemos, ya que nos ayuda a prevenir enfermedades como la osteoporosis y nos mantiene en forma y ágiles.

  • ¡Hola, “cuerpo danone”! No podemos negar que uno de los beneficios más populares de la actividad física es su capacidad para ayudarnos a mantenernos en forma y alcanzar nuestra figura ideal. Pero recuerda, no se trata solo de apariencia, sino de sentirnos bien con nosotros mismos y mantener un peso saludable. El ejercicio nos ayuda a quemar calorías, tonificar nuestros músculos y mejorar nuestra composición corporal.

  • ¡Bienvenido, sistema inmunológico fuerte! Todos queremos un sistema inmunológico resistente y capaz de defendernos de las enfermedades. Adivina qué... ¡el ejercicio puede ayudarnos con eso también! Cuando nos movemos, nuestro sistema inmunológico se fortalece y se vuelve más eficiente en la lucha contra las infecciones y los gérmenes. Así que, si quieres evitar esos resfriados molestos, ¡pon tu cuerpo en movimiento!

  • ¡Hola, mente clara y aguda! No podemos olvidar mencionar cómo la actividad física beneficia nuestra salud mental. El ejercicio regular mejora la función cognitiva, aumenta la concentración y nos ayuda a mantener una mente clara y aguda. Además, reduce el riesgo de desarrollar trastornos mentales como la depresión y la ansiedad. Así que, cuando te sientas un poco abrumado, ¡sal a dar un paseo y verás cómo te sientes mejor!

El ejercicio no solo cambia tu cuerpo, cambia tu mente, tu actitud y tu estado de ánimo

 Ahora que hemos hablado de los increíbles beneficios de la actividad física, probablemente te estés preguntando: "¡Pero, Helena… esto parece fácil pero cuando me pongo a ello… ¡me pierdo!, ¿cómo puedo empezar a incorporar más actividad física en mi vida diaria?, ¡Estoy aquí para ayudarte!

 Lo primero que debes recordar es que la actividad física no tiene por qué ser aburrida o monótona. Puedes encontrar una actividad que te apasione y que te haga sentir emocionado cada vez que lo hagas. Ya sea bailar, practicar un deporte, hacer yoga o simplemente dar largos paseos por el parque, lo importante es que encuentres algo que te haga feliz y que te motive a moverte.

La actividad física no tiene por qué ser una talla única. Hay tantas opciones disponibles que puedes encontrar la que mejor se adapte a tu personalidad y preferencias. Aquí tienes algunas ideas basadas en diferentes tipos de personalidad:

  1. Energético y social: Si eres una persona extrovertida y te encanta estar rodeado de gente, las actividades grupales pueden ser perfectas para ti. Prueba clases de baile, aeróbicos, spinning o incluso un equipo deportivo. Disfrutarás del ambiente animado y motivador mientras te pones en movimiento.

  2. Aventurero y al aire libre: Si disfrutas de la naturaleza y buscas emociones, elige actividades al aire libre. Puedes probar el senderismo, el ciclismo de montaña, el kayak o la escalada en roca. Estas actividades te brindarán una dosis de adrenalina mientras exploras hermosos paisajes.

  3. Tranquilo y centrado: Si prefieres actividades más calmadas y centradas en la mente y el cuerpo, el yoga, el tai chi o el pilates pueden ser ideales para ti. Estas prácticas te ayudarán a fortalecer tu cuerpo y mejorar tu flexibilidad mientras te relajas y encuentras tu equilibrio interno.

  4. Competitivo y enérgico: Si te encanta la competencia y buscas desafíos constantes, los deportes de equipo como el fútbol, el baloncesto o el voleibol pueden ser emocionantes para ti. También puedes probar actividades individuales competitivas como el tenis, el boxeo o el atletismo.

  5. Creativo y expresivo: Si tienes un espíritu creativo y te encanta expresarte, considera actividades como la danza, el ballet, el breakdance o las artes marciales. Estas actividades te permitirán canalizar tu energía y emociones mientras te diviertes y te mueves al ritmo de la música.

  6. Organizado y disciplinado: Si eres una persona metódica y te gusta seguir un programa estructurado, el entrenamiento en el gimnasio con pesas, las clases de entrenamiento funcional o el running pueden ser perfectos para ti. Te permitirán establecer metas claras y seguir un plan de entrenamiento específico.

Recuerda que estas sugerencias se basan en generalidades y que cada persona es única. No dudes en probar diferentes actividades hasta encontrar la que más te apasione. ¡Lo importante es disfrutar del proceso y encontrar una actividad física que te haga sentir bien contigo mism@!

IMPORTANTE para no quedarte en el intento, no te pongas metas inalcanzables, sé realista. Comienza poco a poco e incrementa gradualmente la intensidad y la duración de tus sesiones y recuerda, cada paso cuenta, ¡incluso si son pasitos de bebé! Lo importante es ser constante y hacer del ejercicio una parte regular de tu rutina diaria.

Si necesitas un poco de motivación extra, puedes buscar un compañero de ejercicios. Hacer ejercicio con un amigo o un ser querido no solo te mantendrá comprometido, sino que también hará que la experiencia sea mucho más divertida. Pueden animarse mutuamente, establecer metas juntos y celebrar los logros alcanzados. ¡El ejercicio nunca ha sido tan social!

Otra idea genial es que hagas que pruebes actividades nuevas para mantener la motivación. ¿Has intentado alguna vez hacer zumba, surf o incluso acrobacias en el aire? El mundo del ejercicio está lleno de opciones emocionantes, ¡así que atrévete a probar algo nuevo! Puedes unirte a clases grupales, explorar aplicaciones de entrenamiento en línea o simplemente inventar tu propia rutina en casa. ¡Las posibilidades son infinitas!

La clave que nadie te cuenta es está en disfrutar del proceso y divertirte. Ni te presiones ni te castigues si te saltas un día de ejercicio. La actividad física no debe convertirse en una obligación, sino en algo que hagas por amor a ti mismo y a tu salud. Escucha a tu cuerpo, dale el descanso que necesita cuando lo requiera y celebra tus logros, por pequeños que sean.

Antes de terminar, acuérdate que ante la duda siempre es una muy buena idea consultar con un profesional del campo antes de empezar, especialmente si tienes condiciones médicas preexistentes o si llevas una vida sedentaria. Ellos podrán asesorarte y brindarte recomendaciones personalizadas para que puedas disfrutar de una experiencia de ejercicio segura y efectiva.

En resumen, la actividad física desempeña un papel fundamental en nuestra salud. No solo nos ayuda a mantenernos en forma y alcanzar nuestra figura ideal, sino que también mejora nuestra salud mental, fortalece nuestro sistema inmunológico, nos llena de energía y nos permite disfrutar de una vida más plena y feliz. Así que, ¡vamos, levántate del sofá y comienza a moverte! Tu cuerpo y tu mente te lo agradecerán.

Por si en algún momento se te ha olvidado, te recuerdo que eres capaz de lograr grandes cosas y el primer paso es simplemente comenzar. No importa cuán pequeños sean tus pasos al principio, lo importante es seguir adelante y nunca dejar de moverte. ¡Estoy segura de que te convertirás en un verdadero héroe o heroína de la actividad física!

Si tienes dudas, escríbeme aquí. Estaré más que feliz de ayudarte.

Hasta la próxima querid@s 🥰.


Otros artículos relacionados

See this gallery in the original post

See this form in the original post