5 Mitos sobre Dietas

Es hora de desmitificar las creencias más populares sobre la pérdida de peso y centrarse en lo que realmente funciona para tu salud.


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¿Estás en ese punto en el que te preguntas si todo lo que te han dicho sobre nutrición es realmente cierto? ¿Te pasa cuando hablas con un nutricionista que lo que te dice entra en conflicto con algunas de tus creencias más profundas? Con tanta información que nos rodea sobre este tema es fácil abrumarse, sentirse perdida y contrariada.

Cada vez más personas siguen algún tipo de dieta, bien sea par bajar de peso, para subirlo, para aumentar la masa muscular, para aliviar las digestiones, etc. Y sin embargo, cada vez estamos menos saludables. Pero… ¿por qué? ¿Cómo es posible?

¿Quieres saber más? ¿Preparada? ¡Empezamos! 🚀 🚀

Rompiendo Mitos

Se predice que para el 2030, la mitad de la población Europa será clínicamente obesa, incluidos uno de cada diez niños en edad preescolar.

Cuando comencé este viaje de la nutrición integral me sorprendió descubrir que casi todo lo que nos han dicho sobre la comida y las dietas es incorrecto. Históricamente, hemos tenido una falta de conocimiento sobre la nutrición en general, y muchas de nuestras opiniones sobre nutrición han sido impulsadas por la industria alimentaria, guiando nuestras elecciones.

Me acuerdo cuando iba al instituto si no desayunaba parecía un intento se suicidio. “Ten cuidado a ver si te va a dar algo, me decía mi madre”. Y hoy en día lo “más cool” es hacer ayuno de 16, 18 y 24h. 😵‍💫😵‍💫. Seguro que también has escuchado que eso de que si estás muchas horas sin comer el cuerpo (que es inteligente) entra en estado de “supervivencia” y ralentiza el metabolismo porque no sabe cuándo va a recibir alimentos de nuevo.

Existen tantos mitos sobre la alimentación que es bastante difícil elegir solo unos pocos.

Aquí están los cinco mitos más populares sobre la pérdida de peso:

MITO 1. CALORÍAS DENTRO / CALORÍAS FUERA 🤦🏽‍♀️

La idea de que la pérdida de peso se reduce a una simple ecuación de calorías—calorías consumidas frente a calorías quemadas, ¿no? Sin embargo, esta perspectiva simplista ignora la complejidad del metabolismo humano y el impacto que la calidad de los alimentos tiene en nuestro cuerpo. No todas las calorías son iguales; la forma en que se procesan y utilizan en el cuerpo varía significativamente según su origen. Por ejemplo, 100 calorías de un donut no tienen el mismo efecto en el organismo que 100 calorías de un aguacate.

Además, los estudios han demostrado que las dietas basadas únicamente en el conteo de calorías no son efectivas para la mayoría de las personas a largo plazo. Muchas veces se experimenta una disminución en el metabolismo, lo que significa que su cuerpo quema menos calorías a lo largo del tiempo. Esta respuesta metabólica puede resultar en una pérdida de peso que se estabiliza, lo que lleva a la frustración y al eventual abandono de la dieta.

La calidad de los alimentos que consumimos juega un papel crucial en nuestra salud y bienestar. Las dietas con alimentos procesados y azucarados pueden llevar a un aumento en la inflamación y desregulación hormonal, afectando no solo el peso, sino también la salud metabólica y cardiovascular. Al enfocarnos únicamente en el número de calorías, perdemos de vista el valor nutritivo de los alimentos que consumimos y cómo estos afectan nuestras funciones biológicas.

En lugar de guiarnos estrictamente a la regla de calorías dentro/calorías fuera, deberíamos adoptar un enfoque más holístico hacia la alimentación. Esto es centrarse en la calidad de los alimentos, elegir opciones integrales y nutritivas, y escuchar las señales de hambre y saciedad que nos proporciona nuestro cuerpo. Te invito a que leas este artículo que escribí sobre mindful eating que te puede ayudar.

MITO 2. DIETAS MILAGRO

Si alguna vez has caído en la tentación de una "dieta milagro", eres de las mías. Reconozco que alguna vez lo he intentado aunque sólo fueran 2 días y comprobar que eso no era para mi. La promesa de resultados rápidos y sin esfuerzo es demasiado atractiva como para ignorarla. Sin embargo, aunque estas dietas parecen una solución mágica, son insostenibles y peligrosas para tu salud a largo plazo.

Este tipo de dietas suelen publicitarse con antes y después impactantes, con personas que parecen haber transformado su vida. Sin embargo, detrás de estos testimonios está el hecho de que la mayoría de esas personas no logran mantener el peso perdido a largo plazo y terminan con más peso que cuando comenzaron.Pero eso no te lo cuentan, claro.

El Efecto Yo-Yo

El ciclo de perder peso rápidamente y luego recuperarlo, conocido como el efecto yo-yo, daña tu metabolismo y está vinculado a problemas de salud como enfermedades cardiovasculares y trastornos metabólicos.

A nivel emocional, este ciclo genera frustración y culpa, haciendo que te sientas atrapada en una búsqueda constante de la dieta perfecta.

Además, estas dietas pueden causar deficiencias nutricionales, pérdida de masa muscular y problemas de salud a largo plazo.

La verdadera clave para perder peso de manera sostenible no está en soluciones rápidas, sino en adoptar hábitos saludables a largo plazo.

3. LA DIETA BAJA EN GRASA

Durante décadas, las dietas bajas en grasa han sido promovidas como la solución para mejorar la salud del corazón y perder peso. La idea era sencilla: comer menos grasa para evitar que esta se acumule en el cuerpo. En principio podría tener sentido, ¿no? Pues no 😅. Muchas dietas bajas en grasa han resultado ser contraproducentes.

Uno de los principales problemas con estas dietas es que muchos productos bajos en grasa compensan la falta de sabor añadiendo azúcar o ingredientes procesados. Cuando una etiqueta tenga un ingrediente de difícil lectura… directamente ni lo intentes, deja lo que hayas cogido en su estante y elige otra cosa.

Otro aspecto a tener en cuenta es que no todas las grasas son malas. Las grasas saludables, como las que se encuentran en los aguacates, el aceite de oliva, los frutos secos y el pescado, son esenciales para el buen funcionamiento del cuerpo. Contribuyen a la salud del corazón, mejoran los niveles de colesterol, proporcionan energía duradera y sacian.

4. LA “PROTEMANÍA”

La “protemanía” se refiere a la creciente obsesión por consumir proteínas en exceso, promovida por una cultura que asocia la proteína con la construcción muscular y la pérdida de peso. Con el auge de las dietas altas en proteínas y la proliferación de suplementos proteicos, muchas personas han comenzado a creer que cuanto más proteína consuman, mejor será su salud y físico. Sin embargo, esta percepción no solo es exagerada, sino que puede llevar a desequilibrios nutricionales y efectos adversos en la salud.

Es fundamental entender que el cuerpo necesita proteínas pero también requiere una variedad de otros nutrientes para funcionar correctamente. Cuando se consumen grandes cantidades de proteínas, especialmente en forma de suplementos, el exceso se convierte en grasa. También puede ejercer presión sobre los riñones, especialmente en personas con problemas preexistentes. En lugar de priorizar la proteína a toda costa, es crucial adoptar un enfoque equilibrado que incluya carbohidratos y grasas saludables.

La clave para una alimentación saludable no está en la obsesión por un solo macronutriente, sino en encontrar un equilibrio. Incorporar una variedad de fuentes de proteínas, como legumbres, nueces, semillas y productos lácteos (tan demonizados 😈 hoy en día… a mi, personalmente, me encantan), junto con carbohidratos integrales y grasas saludables, puede proporcionar todos los nutrientes necesarios para mantener un cuerpo sano y en forma.

5. PERDER PESO CON EJERCICIO

¡Este me encanta! Dime cuántas veces has escuchado esto: Cómete este trozo de tarta que tú luego lo quemas. ¡Ni que fuera tan fácil!

Este mito es particularmente popular después de Navidad. Cuando los gimnasios se llenan de nuevos socios con remordimientos de todo lo que se han metido al cuerpo el último mes. Se ha apuntado a ver si lo bajan 😅.

Siento decirte que el ejercicio por sí solo tiene poco efecto en la pérdida de peso. La alimentación es mucho más importante. Yo diría un 70% alimentacion y 30% ejercicio.

Es verdad que algunas logran perder algo de peso pero otras en realidad lo ganan debido a los mismos mecanismos por los cuales la restricción calórica no funciona: nuestros cuerpos se adaptan para reducir su tasa metabólica y aumentar el hambre.

Sin embargo, hay dos verdades absolutas:

  1. El ejercicio es increíblemente bueno para tu cuerpo, tu salud mental, y para prevenir enfermedades como la demencia y el cáncer.

  2. El ejercicio nos ayuda a mantener un peso saludable.

¿ERES UNA TOFI?

(del ingles: Thin Outside, Fat Inside, Delgada por Fuera, Gorda por Dentro)

Si bien verse bien por fuera es muy importante para muchas personas, cuidar tu salud general y prevenir la grasa interna es más importante para la longevidad. Después de todo, ¿de qué sirve perder unos kilos por fuera si tus órganos internos están cubiertos de grasa?

Los TOFI están en alto riesgo de problemas de salud, aunque no lo parezca. Centrarse en la calidad de tu dieta, comer alimentos integrales y mover tu cuerpo en la vida diaria son formas de mantenerte metabólicamente saludable y prevenir la grasa interna.

MIS TRES PRINCIPALES PISTAS PARA DETECTAR UN MITO DE DIETA:

  1. Considera quién está obteniendo beneficios de ella: ¿están tratando de vender ciertos productos alimenticios o bebidas?

  2. Desconfía de la publicidad que sugiere una solución rápida.

  3. Considera quién está dando el consejo: ¿tienen formación en medicina, ciencia o nutrición?

MI PROPUESTA SOSTENIBLE

No existe una solución rápida para mantener una dieta y un peso saludables. Apunta a un cambio gradual y holístico que se enfoque en cambios a largo plazo que continuarás por el resto de tu vida. Creo que debemos recuperar la palabra dieta junto con nuestra antigua cultura de saber realmente lo que estamos comiendo, cómo prepararlo, cocinarlo y almacenarlo.

Este enfoque más sutil traerá lentamente tu cuerpo de vuelta a un nuevo equilibrio que no desencadena todas esas señales de hambre, baja energía y cambios en el metabolismo. Nunca más tendrás que preocuparte por la industria de las dietas.

¿Necesitas ayuda? Escríbeme aquí con las dudas que tengas. O bien:

¡Descrubre mi método!

¡Espero que te haya gustado! ¡Hasta la semana que viene! 😊

XXX

H💜🙏🏽💜


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